El proyecto surge a mediados de marzo, en plena pandemia COVID-19, cuando Clara Cantore se entera de que Andrea Gamarnik y su equipo estaban haciendo un trabajo maratónico en el laboratorio, 15 horas diarias, de lunes a lunes.
Así, Clara decide hacerles un regalo sorpresa enviándoles una canción en apoyo y agradecimiento por su trabajo. Esta iniciativa fue extendiendo la invitación a otros artistas quienes generosamente decidieron sumarse, Sandra Mihanovich, Eruca Sativa, Nahuel Pennisi, Juan Carlos Baglietto, Marta Gómez y Piñón Fijo, entre otros.
Esta primera experiencia abrió el camino para repensar el motor de nuestro trabajo artístico en esta coyuntura y nos llevó a querer compartirlo y profundizarlo para que muchas otras personas puedan disfrutar de la música pero, esencialmente, conocer el trabajo de los científicos.
Así, nace Música Por La Ciencia.